Edad recomendada: a partir de 3 años

¡Qué feliz me siento! Con estos monstruitos tan coloridos, comprender las emociones va a ser muchísimo más fácil. 

Las posibilidades que ofrecen estos monstruos tan curiosos son muy amplias, desde identificar las emociones escribiendo su nombre, hasta utilizar las plantillas para dibujar sus siluetas, pasando por jugar con ellos sobre una mesa de luz.

Además, como vienen acompañados de una ruleta de colores, podréis comprobar quién es el más rápido cazando monstruos. Solo tendrás que girar la ruleta e ir a por el monstruo indicado. Ganará quien haya acumulado más criaturas. Al tratarse de una ruleta de plástico, podrás escribir con el rotulador borrable distintos verbos o situaciones para que los más pequeños tengan que relacionarlas con las emociones. ¡Un material completísimo!