Edad recomendada: desde los 8 años

Estas llamas parece que solo traen cosas buenas, a no ser que cuando acabe la ronda tengas alguna en tu posesión En este juego el objetivo es ser quien menos puntos tenga acumulados cuando acabe la partida. Reparte a cada jugador 3 fichas blancas y 6 cartas numeradas, coloca las cartas en un montón en el centro y a su lado la carta de espectáculo de magia.

¿Cómo se juega?

1. Por turnos, cada jugador echará una carta sobre el montón de descartes, que tendrá que ser del mismo número o del siguiente.
2. Si el jugador ha echado una llama, colocará una ficha en una de las estrellas de la carta de espectáculo
3. Si el jugador no puede echar ninguna carta, tendrá que coger una del montón o decidir plantarse, quedándose con las cartas definitivamente para puntuar al final de la ronda

Además, el Lamakadabra añade acciones que cambian el juego. Si la carta jugada tiene un círculo ¡regala una ficha a otro jugador! Si la carta tiene un rectángulo, el jugador de su izquierda robará una carta del mazo central y si la carta jugada muestra una estrella azul, el jugador cogerá la ficha azul mágica esté donde esté. Y no podemos olvidar el espectáculo de magia. Cuando un jugador haya echado una llama y colocado la última ficha en el espectáculo, si el siguiente jugador no puede echar una llama tendrá que coger todas las fichas que se encuentren sobre la carta. En cuanto un jugador logre acabar con sus cartas o todos se hayan plantado, se hará un recuento. Por cada carta se recibirá el número correspondiente de puntos (1-6), por una llama 10 puntos y por una ficha azul otros 10.

¡En este juego menos es más!